Siempre
después del amor
se van
los besos
y las
bocas no cantan
en verdad
no dicen nada,
después de cada muerte
ni los
brazos son perversos
ni las
caricias anidan
en el
tronco ni en las ramas.
Siempre
después del amor
cuando el
fin llega
la piel
se hace más fria
y a veces
más amarga,
los ojos
con sus lágrimas
niegan
cualquier sonrisa
y no
importa si fuíste felíz
en tus
sueños con resaca.
Siempre
después del fin
llegan
los rencores
los
dientes apretados
los ojos
que no brillan,
las
palabras mudas,
la división de los amores,
la cólera en las manos
y la risa
sin cosquillas.
Después de los despueses
todo
tiene sentido
nada se
puede explicar
todo,
todo se acaba,
los
perfumes de siempre
te uelen
a podrido
mientas
los tienes aún
bailando
en la solapa.
Siempre cuando
terminas
o debo
decir, a veces
la voz te
corta el aliento
como una
cruel navaja,
no
importa si te matas
si
asesinas o falleces
siempre o
casi siempre
lloras al
borde de la cama.
Siempre
creo en los finales
como se
fueran comienzos
ardiendo
ellos van
y vienen
en mi alma,
en mis
ojos, en mis manos
los
venero como a los excesos
los vivo,
los termino
y los
entierro como nada.
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